POR JESSICA ROSALES
UNIMEDIOS/ SALTILLO, COAHUILA.- En su tradicional peregrinaje, cientos de fieles acudieron a la iglesia de “San Juanita” para venerar la imagen de Nuestra Señora de San Juan de los Lagos que llegó a Saltillo proveniente de Jalisco, ciudad en la que los feligreses agradecieron con mandas milagros cumplidos y otros le realizaron alguna petición.
“La salud que es lo principal que hay que pedirle porque sin la salud que vamos a hacer, además ya estamos viejos para pedir otra cosa, yo nada más le pido salud y la fortaleza para bajar de mi casa y venir a visitarla, todos le pedimos el milagro”, señala la señora Francisca Pérez.
Esta representa su octava visita a Saltillo, luego de que cada 2 años la iglesia la recibe con una serie de celebraciones ecuarísticas que se realizan durante todo el día. Es considerada como milagrosa y la segunda más visitada en México después de la Virgen de Guadalupe.
“Mi esposa es muy allegada a la virgen porque le pedimos con mucha fe que le quitara una enfermedad que tenía y gracias a Cristo y a María que le quitó un cáncer que tenía en la matriz”, compartió el señor Carlos Chávez.
La primera ocasión que se concretó una visita fue en 1999, cuando la parroquia local cumplía 20 años; desde entonces, en diferentes periodos, su paso por la capital coahuilense se ha quedado como una tradición de fe
Don Carlos comparte el milagro que le hizo la Virgen hace varios años en donde manifiesta que tuvo un accidente de gravedad que lo dejó con estallamiento de víceras, a pesar de la dificultad, asegura que los médicos lograron controlarlo y asume que su vida la salvó la Virgen de San Juan de los Lagos.
La imagen de la virgen de San Juan de los Lagos, llegó la noche del martes a Saltillo, permanece durante todo el día del miércoles y será despedida este jueves a las 830 horas con una misa para posteriormente continuar su viaje.
Su historia inició cuando un religioso regaló la pequeña estatua a los indios, representando a la Virgen de la Concepción, para más tarde tomar el nombre del lugar quedando finalmente como Virgen de San Juan de los Lagos o Nuestra Señora de San Juan de los Lagos.
De entre los milagros que se cuentan en torno a la Virgen de San Juan de los Lagos, se dice que el primero de ellos fue en 1963 cuando resucitó a la hija de un volantinero que al practicar un acto circense cayó atravesada por estacas muriendo instantáneamente.
En ese momento una mujer puso sobre el pecho de la afectada la imagen de la Virgen y resucitó. La familia en agradecimiento difundió el hecho y de esta manera comenzó la tradición de visitar a la Virgen.
La imagen está hecha de una mezcla de pasta de caña de maíz, que data de aproximadamente el siglo XVI, fabricada en Pátzcuaro, Michoacán, por la orden de Don Vasco de Quiroga con la intención de evangelizar varias tierras de la Nueva Galicia y mide 38 centímetros de altura. Debido a la gran cantidad de peregrinos que se comenzó a dar cita para venerarla, se construyó el primer Santuario de la Virgen de San Juan, hecho de paredes de adobe y techo de paja. Ahí se colocó a la imagen y para 1634 se inició la construcción de una segunda ermita ordenada por Don Juan Contreras Fuerte para brindarle mayor protección, finalizando su edificación en 1641.
Debido a que seguía en aumento el número de visitantes, sólo pasaron seis años para que de nuevo se ordenara por parte del obispo de Nueva Galicia, Juan Ruíz Colmenero, una tercera ermita más sólida y con mayor espacio, las historias relatan que el primer capellán, Juan Contreras Fuerte construyó un pozo en este lugar, surgiendo milagrosamente una fuente de agua junto al arroyo.