Por Julián Parra Ibarra
Mucho ruido
Tanto ruido se generó en torno a los malos manejos de Simas Torreón, que
cuando se anunció la realización de la rueda de prensa para dar a conocer los
resultados de la auditoría, se llegó a pensar que ahí podría surgir información
importante en torno al quebranto en que cayó la paramunicipal durante la
administración de Eduardo Olmos Castro.
Pero no, fue mucho ruido y pocas nueces. Salieron con la batea de babas de
que se encontró un gran desorden, muchas irregularidades, pero nada que se
pudiera siquiera acercar a la palabra desvío, fraude, quebranto ni nada por
el estilo. Es decir, carpetazo al asunto y si alguien vuelve a preguntar hay que
decirles que eran un desmadre, pero de raterías, nada.
Tapaderas
No se podría medir a todos con el mismo racero, pero algunos Consejeros
sirvieron como tapadera a los malos manejos que se dieron hacia el interior
del Sistema, pero ahora como San Pedro, han negado todo tres veces antes
del canto del gallo. Ahora resulta –porque ya no está- que Jesús Campos
Murillo es de lo ‘pior’, porque mantuvo en sus puestos a mucha gente por
cuestiones políticas, y por desgracia durante su gestión no se hicieron bien
las cosas, según Félix Pérez Murillo.
¿Y por qué en su momento él como Secretario Técnico del Simas no lo
denunció o al menos lo advirtió a tiempo? ¿No será que cada vez que
intentaba decirlo se atragantaba con los 66 mil pesos mensuales que le
pagaron durante la administración olmoscastrista por ocupar un puesto que
siempre fue honorario, y que lo volverá a serlo con Miguel Ángel Riquelme?
En son de broma, a días de haber tomado posesión Riquelme Solís dijo –por
el sueldo que gana Pérez Murillo-, que de haberlo sabido, en vez de haber
contendido por la alcaldía, mejor hubiera pedido que le dieran la secretaría
Técnica del Simas. “Gana más que el Presidente Municipal”.
Como dijo el rancherito
A toro pasado, hoy se informa que Chuy (Jesús Campos Villegas) cuando
los consejeros le empezaron a pedir cuentas “abandonó el barco”, y nunca
tuvo nada que entregar, porque nunca tuvo el control del Sistema ¿Y los
Consejeros entonces para que estaban, para qué sirven si se callaron todo lo
que sabían, todo el tiempo?
Lo cierto es que Campos Murillo es un tipo que tenía una buena imagen
y una trayectoria pulcra en la iniciativa privada, y le salió muy caro haber
aceptado la invitación de dirigir al Simas. Quizá pensó que iba a ir a
administrar un estanque con pececillos de colores, pero no, lo mandaron a
nadar con tiburones. Y se lo tragaron.
Hoy Jesús Campos dirá quizá como dijo el racherito: Si he sabido ni nazo.
Agua al cuello
Pero mientras que los consejeros de Simas no encontraron más que
desorden administrativo y financiero, nadie explica por qué el Sistema, que
vivió una situación similar de quebranto y números rojos al término de la
administración del finado Mariano López Mercado, los siguientes 13 años y
cuatro administraciones fue una empresa eficiente con números negros, y
que en el periodo de Eduardo Olmos volvió a las andadas y a operar otra vez
con números rojos.
La paramunicipal cerró con el agua al cuello, porque además de la deuda
de 416 millones de pesos heredada por la anterior administración, súmele
el grave deterioro en equipo, llámese pozos, planta tratadora, vehículos en
que se dejó a la dependencia, y que habrá de costarle ‘un ojo de la cara’ a la
actual administración –que es un decir, porque eso lo van a pagar todos los
ciudadanos torreonenses-.
Broche de oro
Para cerrar con broche de oro la información de este miércoles, es que
el ex contralor del Sistema durante la administración de José Ángel Pérez
Hernández -Petar Entchev Petrov-, ganó una demanda laboral por despido
injustificado, por lo que Simas deberá liquidarle la módica cantidad de 3
millones y medio de pesos.
Y, en curso están entre cuatro y seis demandas más de ex funcionarios de la
misma administración que, de ganarle al Simas, éste tendría que hacer un
desembolso cercano a los 12 millones de pesos. Pero no hay nada malo, puro
desorden. No sean mal pensados, no es lo que parece.
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@JulianParraIba