UNIMEDIOS/ JESSICA ROSALES.- Miseria, marginación y pobreza, así viven decenas de habitantes de la Colonia Héroes de Nacozari, un sector irregular al poniente de Saltillo en completo olvido de las autoridades de todos los niveles de gobierno.
Niños y personas de la tercera edad tienen que subir y bajar a diario un cerro para llegar a sus casas de lámina y cartón, los que tienen mayor suerte cuentan con un cuarto de block que pudieron edificar con ayuda de norteamericanos altruistas.
Aquí, viven niños que sólo conocen la pobreza, nacieron en ella, cocinan al aire libre con la poca luz cuando llega y un pozo de agua a punto de extinguirse, que en ocasiones no les permite tener para beber mucho menos para bañarse.
Sometidos a vividores que aprovechan su situación irregular para vender terrenos de los cuales no son propietarios, los habitantes de este sector viven esperando la actuación de la autoridad para detener fraudes y cobros ilegales a familias que sólo buscan un techo, pues hay quienes les cobran hasta 5 mil pesos por un pequeño terreno en el cerro.
“Autoridades no hacen nada, lo que pasa que mandan puros bandidos, puros sin vergüenzas que estén fregando a la gente, con dinero y que venden, pues aquí no es de nadie, aquí es del gobierno parece que dicen, pero hay anda uno vendiendo terrenos y quitando, sí en todo el cerro, allá varia gente los ha fregado con mucha feria”, denuncia José Valero, Habitante del lugar.
Sentado en lo que es la cocina, un cuarto al aire libre con una estufa de leña Don José puede observar desde esta parte del cerro la ciudad, a lo lejos se alcanza a ver el Biblioparque, pero señala su principal interés en ese momento es comer, pensar en divertirse es algo fuera de su alcance, pues quienes viven ahí ni siquiera piensan en eso.
El transporte no llega hasta este lugar, la policía tampoco, viven a su propia ley, con sus propios recursos, cuidándose entre ellos, no cuentan con los servicios básicos, mucho menos con teléfono o internet, pues incluso la comida, es ya un lujo que no pueden darse todos días.
“No hay luz, no hay agua, no hay nada, ahorita no tenemos ni agua para tomar en la casa, ni para bañarnos, en mi casa tenemos un cuarto nomás y nomás un cuarto, pues con agua, y con la luz, y con una despensa, en veces juego con frijoles, como anoche no comimos nada, porque papá no anda trabajando se lastimo de la espalda y no andaba trabajando y no almorzamos”, comparte el pequeño Brando Costa de tan sólo 11 años de edad.
Brandon nació en este lugar, no conoce otro, sus sueños no van más allá él no pide juguetes o computadores, sólo espera que el agua y la luz a su casa, una despensa y una bicicleta para trasladarse a otro sector de la ciudad para trabajar ayudando a las personas y apoyar a sus padres.
Los candidatos en este sitio están ausentes sólo se observan camionetas de los partidos pidiendo el voto y la ayuda llega no contribuye a solventar sus necesidades “saleros y camisas nos regalan como si uno fueran a morder a las camisas y a los saleros”, expresa Brandon.
“Trae rollito y frijoles”, expresan tras recibir despensas de la UNTA
De repente todos se juntan en una parte del cerro ven a lo lejos llegar una camioneta, es José Luis López, líder de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas en Coahuila, lo reciben entre gritos y aplausos, porque saben que hoy si comerán.
El líder de la UNTA reúne a las familias les entrega su despensa, cada uno se acerca y esboza una sonrisa y emoción porque encuentran en las cajas rollo, cereal, pasta y productos de la canasta básica que hace días no comían.
“Gente de aquí tienen necesidades enormes, tú lo ves en que condiciones viven, en qué condiciones está viviendo esta gente y nosotros nos hemos avocado a tratar de solventar algo de lo que carecen”, señala José Luis.
Las personas comienzan a aplaudir y agradecer el apoyo, que a decir de los propios beneficiarios, es el más importante que han recibido, “Ahorita estoy muy agradecida con esto, que nos está dando el licenciado porque deberás le digo a la gente ahorita estábamos pasando por una situación bien difícil que al día nos acostábamos hasta sin cenar, y le digo a mi hijo ya bendito sea Dios ya nos llegó una ayuda muy buena”, declara Laura Patricia Acosta, Habitante de la colonia.
Diputados en el letargo, viven sin ley en Héroes de Nacorzari
Estas familias dependen de sus diputados aquellos por los que votaron, quienes a 12 años de este asentamiento no han autorizado la regularización de la tierra, todos los trámites están hechos a través de la intervención de la Unión agrícola UNTA solo esperan a que los legisladores puedan agendar su caso para acceder a los servicios básicos, mientras eso ocurre se ajustan a su propia ley, esperando que mañana si tengan alimento que comer.
A pesar de la intervención de la Unión Agrícola los diputados siguen en el letargo legislativo, pues no se ha avanzado en la regularización de los terrenos lo que impide la introducción de servicios básicos.
“Hemos tratado de ayudar a gestionar la regularización de estos terrenos que son del gobierno del estado, los adquirió el gobierno del estado en la pasada administración, estamos esperando el decreto del congreso del estado para que se los donen y puedan regularizar su situación, ahorita no les hemos mandado material de construcción hasta que no tengamos la regularización definitiva de la colonia para que ellos empiecen a construir, para que vivan algo más de digno”, indica José Luis López, líder de la UNTA en Coahuila.
Al ver las condiciones en las que vive esta gente, la UNTA ha decidido acudir en lapsos cortos para apoyarlos, “porque yo veo que no es de humanos tener en estas condiciones viviendo a esta gente, yo soy enemigo de eso, yo creo que los gobierno deben poner algo de su parte para que ellos no viva así, creo que todos somos mexicanos, todos somos coahuilenses, aunque ellos no generen tanto impuestos, pero merecen darle una vida digna, yo voy a luchar porque ellos tengan una viva digna, que tengan una casa, un cuarto digno donde vivir con su familia”, manifiesta.
Con imágenes de Raymundo Bazaldúa