UNIMEDIOS/NADIA BALLESTEROS
Saltillo, Coahuila. 15 de abril de 2020.- Más de 560 empresarios participarán, de manera presencial y virtual, en la reunión que se celebrará el próximo lunes en Monterrey con los tres gobernadores del Noreste de México, donde se analizará la estrategia para reactivar la economía de la región dio a conocer Miguel Ángel Riquelme.
El gobernador de Coahuila dijo que: “estaremos con 60 empresarios en la parte física, y más de 500 empresarios estarán también en la transmisión participando y siguiendo los acuerdos que los tres estados habremos de tomar en materia económica para los próximos días y meses”, derivado de la contingencia sanitaria por el Covid-19.
“Además, los acuerdos que tomaremos para que el noreste siga siendo una fuente económica del país, del desarrollo de la parte norte, y sobre todo de la frontera con el estado de Texas, en la parte migratoria, comercial y productiva”, informó el mandatario.
Los detalles del encuentro con los empresarios se afinarán este viernes en Saltillo, durante la reunión de trabajo que sostendrá Riquelme Solís con Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, y Jaime Rodríguez Calderón, de Nuevo Léon, para revisar la situación de la región a días de que tentativamente concluya el periodo de contingencia sanitaria.
Hace algunos días, se dio a conocer que los tres estados buscan diseñar una estrategia para reactivar la economía de esta región en coordinación con los empresarios establecidos en cada entidad, al considerar que el periodo de recesión podría prolongarse.
Francisco García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas, declaró recientemente que los empresarios son los que generan la riqueza y pagan los impuestos y ante la falta de algún programa por parte de la Federación para apoyarlos, el gobernador Riquelme propuso anticiparse a la Federación y a otras entidades.
Por su parte, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez, afirmó: “nosotros sí vamos a apoyar a nuestras empresas y negocios, así tengamos que hacer modificaciones presupuestales para tener la protección de las empresas y los empleos”, y argumentó que no se trata de abandonar el pacto fiscal como han supuesto algunos actores políticos, sino de modificarlo porque es injusto, y “ayudarlo a bien morir”.