UNIMEDIOS/ CIUDAD VICTORIA, TAMPS.- La Confederación Nacional Campesina fue convocada por el Gobierno Federal a formar un ejército que marche contra sus únicos enemigos declarados: el hambre, la pobreza y la injusticia, en tanto que pidió a la propia administración a no dejar las luchas solamente por cuestiones electorales.
Al inaugurar el Congreso Extraordinario de la CNC con la representación presidencial, Jorge Carlos Ramírez Marín, secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano enfatizó que esa es la razón por la que el presidente Enrique Peña Nieto no esconde y tiene en el Congreso de la Unión, donde debe de estar el centro de la discusión democrática, las iniciativas que ha propuesto para transformar al país.
El titular de la SEDATU habló ante más de 6 mil delegados cenecistas del país, gobernadores, líderes campesinos, legisladores agraristas e invitados extranjeros que se dieron cita en el Polyforum de Ciudad Victoria, Tamaulipas, donde manifestó que la obligación de la CNC, con sus más de 4 millones de militantes, es luchar por la transformación rural y el campo del mañana en un esfuerzo conjunto con la actual administración.
El funcionario federal afirmó que el presidente Enrique Peña Nieto se ha propuesto lograr un campo productivo, rentable y sustentable, pues de un total de 196 millones de hectáreas que tiene el territorio nacional, sólo 21 millones pueden cultivarse, superficie muy pequeña comparada con la gran riqueza nacional que, en su opinión, se concentra en 2 millones 160 mil hectáreas en las que se asienta el 85 %de los hombres del campo, zonas urbanas a las que llegaron con esperanza, luego de abandonar sus tierras en busca de una vida mejor que todavía no tienen.
Ramírez Marín se pronunció por una reforma financiera porque no se puede admitir una banca de desarrollo que cobre intereses más altos que la comercial, cuando el campo mexicano requiere financiamiento y crédito oportuno, pagable y, sobre todo, en términos de igualdad; lo mismo que una reforma energética, a fin de que se abarate el precio de los fertilizantes.
A su vez, el senador Gerardo Sánchez García, presidente de la Confederación Nacional Campesina, aseguró que tiempos nuevos y muy alentadores se avecinan para el país y el campo mexicano, con la construcción de un modelo de desarrollo que muestra los nuevos instrumentos institucionales para enfrentar y erradicar el hambre, la pobreza, el desempleo, la orfandad y el desencanto que fue una constante en el pasado reciente.
“Estamos para jalar con el presidente Enrique Peña Nieto y los campesinos de la CNC no nos rajamos”, expresó Sánchez García.
El dirigente de la CNC sostuvo también que este congreso titulado “El Pacto por México para el Campo” es una muestra de que los cambios son ya irreversibles y que la lucha por una Reforma Profunda al agro empieza a ver la “luz al final del túnel”, porque, destacó, con el Presidente Enrique Peña Nieto, Presidente de México, se ha marcado el rumbo del País que “todos queremos”.
Los funcionarios que participan, explicó, lo hacen con la clara instrucción presidencial de exponer el diseño de sus políticas públicas y que éstas, se inscriban en las cinco metas fundamentales y sintetizadas en: un México en Paz, Incluyente; con Educación de Calidad; México Próspero; y con Responsabilidad Global.
“Ello, significa que se rompen viejos esquemas y atavismos inerciales, decisiones verticales y se entra de lleno a la construcción de un modelo con cambios de actitud que combata la desigualdad social, genere crecimiento económico y empleos y se dignifiquen las condiciones de vida de la gente del campo y lo haga más productivo, competitivo y próspero”, manifestó.
Al congreso de la CNC que se desarrollará hasta el 28 de agosto asistieron también los gobernadores de Chihuahua, César Duarte Jáquez, el de Durango, Jorge Herrera Caldera, y el anfitrión, Egidio Torre Cantú, de Tamaulipas, así como Juan Báez, dirigente de la Liga cenecista en la entidad.