Los presuntos asesinos interpusieron una demanda en contra de la madre de la menor para evitar que tuviera contacto con su hija quien estaba en el octavo mes de embarazo. Autoridades zacatecanas la admitieron y activaron una orden de reestricción, el día que Erika volvió a ver a su hija estaba muerta, había sido asesinada a golpes por su novio y su suegra.
POR ALMA GUDIÑO
UNIMEDIOS/ SALTILLO, COAHUILA.- 18 de septiembre de 2019.- A sus 14 años de edad, Claudia Iveth Lomas Ramírez conoció a su novio y quien se convertiría en el padre de su hija, nunca imaginó que viviría momentos de terror al ser torturada por su pareja y su suegra, quienes tras los golpes que le propinaron terminaron con su vida.
Erika Esmeralda Ramírez Mazo, mamá de la menor víctima de feminicidio en Concepción del Oro, Zacatecas, dio a conocer que ambos se conocieron en la Secundaria Técnica del pueblo zacatecano y al considerarlo un buen muchacho otorgó su consentimiento para el noviazgo.
Fue una hermana de Jonathan Alejandro, quien presentó a la menor con el ahora presunto asesino, Claudia cursaba el segundo año de secundaria y se hicieron novios, todo estaba bien, habían durado un año con su relación y hacía seis meses al saber que estaba embarazada que decidieron vivir juntos.
La familia de Claudia, originaria de Saltillo, radicaba en aquel entonces en Concepción del Oro, por lo que la historia que terminó en tragedia comenzó a tejerse en aquella ciudad.
Erika Esmeralda, se enteró del embarazo cuando su hija estaba entre la semana seis y ocho de gestación, debido a que se desmayó en la escuela y se comunicaron con ella para informarle de lo ocurrido. Claudia estaba consciente, pero tenía un color blanco y se quejaba de dolor de abdomen
Un examen confirmó que el resultado era positivo, la mamá de Jonathan Alejandro, habló con Erika Esmeralda, y le aseguró que su hijo le iba a responder.
Erika Esmeralda, sostuvo que se enteró el 25 de junio de este año que Claudia Ivethe era golpeada, cuando ella radica en Chihuahua, le informaron a través de una llamada telefónica que su niña estaba golpeada, por lo que le dijo a otra de sus hijas de nombre Johann, que fuera a asesorarse al Ministerio Público.
Al día siguiente, al llegar a la Fiscalía, se encontraba Fatima Imelda, mamá de Jonathan Alejandro, una hermana y la propia Claudia, declarando que ya no quería ver a su mamá, porque se sentía mal y tenía miedo de que pudiera perder al bebé.
Autoridades de zacatecas admitieron una demanda de los presuntos asesinos en contra de la madre de la menor
Los presuntos asesinos interpusieron una demanda en contra de la madre de la menor para evitar que tuviera contacto con su hija quien estaba en el octavo mes de embarazo. Autoridades zacatecanas la admitieron y activaron una orden de reestricción, el día que Erika volvió a ver a su hija estaba muerta, había sido asesinada a golpes por su novio y su suegra.
«Me prohibieron las vistas, porque decían que por mi culpa se ponía mal y que tenían miedo a que perdiera a la bebé, la licenciada sugiere eso, que yo no me acerque”, dijo Erika quien desde el mes de mayo había perdido el contacto con su hija.
Entre sus pertenencias Claudia tenía una llave, con una tela de color rojo, se presume que era la llave de su casa, ubicada en la calle 20 de Noviembre, de la colonia Obrera, en la casa marcada con el número 10, por lo que Erika Esmeralda, piensa que su hija quería escaparse.
Piden proceso judicial se realice en Saltillo
La familia, quien pagó 20 mil pesos para el traslado del cuerpo se encuentra ahora en Saltillo, y piden el apoyo al gobernador para que Jonathan Alejandro sea trasladado a esta ciudad en donde esperan se continúe el proceso judicial al destacar que no confían en las autoridades de aquella entidad, ya que fue ahí donde las acciones de la Fiscalía les impidieron tener contacto con su hija.
Jonathan Alejandro, se encuentra recluido en el tutelar de menores de Zacatecas, en donde se llevan a cabo audiencias para fincarle responsabilidades.
Con 8 meses de embarazo Claudia fue torturada
De acuerdo a la revisión del cuerpo que se pudo realizar cuando la preparaban para los servicios funerarios, la familia se percató de huellas de violencia como cráneo sumido, y muñecas y pies con señales de que era amarrada.
De acuerdo a un tío de la menor, la joven fue maltratada y golpeada por más de una persona por lo que piden que también se juzgue a la suegra quien habría participado en el homicidio y en abandonar el cuerpo en una clínica del IMSS.
De acuerdo a información de la Fiscalía de Zacatecas, Claudia murió por asfixia de estrangulamiento, pero la familia dice que pudo ser golpeada en su cabeza.