Psí d la vidaePor: Lic. Any Salgado

¡Eres todo para mí!, esas fueron las primeras palabras que aferraron a Carmina a debatirse entre el amor propio y el amor naciente por su nueva pareja. Esta mujer con una historia familiar tradicional, con madre al tanto de todo y padre ausente. Actualmente, en un siglo de búsqueda de equidad, existen ciertos vestigios de aquella sociedad donde el doble discurso es: cada quien si es hombre o mujer tiene su rol y ante él, fluye. Carmina lo vivió, lo acepto y…buscó vivir un patrón parecido; el amor se tiene porque se lucha, ese era “mantra” cada vez que tenía una pareja. Sólo que luchar estaba lejos de brindarle esa protección y pertenencia, que defendía tanto mi estimado Abraham Maslow con su Jerarquía de Necesidades, Carmina no luchaba sino sufría cada vez al intentar “ser feliz” con su amor en turno. Al principio todo marchaba bien hasta que amar se convertía en un concurso de merecer los afectos y atenciones de su pareja. La sensación de sentirse necesitada y el miedo de ser abandonada eran los elementos a los que Carmina se había tornado aficionada. ¡Si no me vas a dar lo que necesito, dime y mejor terminamos! , esas palabras eran las más temidas por esta mujer que al mirarse al espejo veía culpa por los tacos o el refresco, que tocaba su cuerpo pensando que un poco más de firmeza en las piernas sería la clave de que Él jamás se fuera. La ira que sentía de no lograr que Él dejara de hablar de terminar y la viese cómo una mujer única, las compartía en su soledad con una botella de vodka y las heridas causadas en sus piernas porque ahí “no se ven tanto”. Ante comentarios de amigos y familia sobre lo desgastada que se veía cada vez que llegaba un nuevo “Él”, eran motivos suficientes para empezar a hablar de la lucha y dolor como banderas para llegar a la cima de un amor verdadero. El problema era que esos hombres que llegaban, eran memoria acumulada en el celular con mensajes como: solo puedo a las cuatro en punto, hoy no tengo dinero porque aún no me pagan, si así te vas a vestir no saldremos, el sexo es importante así que tu sabes si no quieres ó si te vas a poner así no quiero hablar contigo. Carmina aceptaba cada una de las exigencias porque dejarlos sería demasiado y amar era su adicción. Una adicción que la había llevado a intentar suicidarse dos veces para “terminar los problemas porque ya no podía más”, esa vida en la que cada vez que terminaba una relación buscaba a sus amigas para “sacar las penas” y despertar con un extraño. La adrenalina de lo nuevo solo era un intermedio para el nuevo “Él”. La colitis y gastritis eran sus compañeras fieles cada semana, el doctor decía que necesitaba acudir con un psicólogo, que su problema no era en sí del estomago devastado por cazar mariposas en el desierto o ese intestino cansada de retener lo tóxico de su entorno. Un viernes en la tarde, a esas horas en que la gente acostumbra a salir del empleo, llegó al consultorio una mujer parecida a esas sirenas de los cuentos. La impaciencia por contar su vida, su historia y las desventuras con tantos “Ellos”, fue el motivo principal que la llevó a atreverse a transformar su esencia. Carmina mostró las cicatrices en sus piernas, cicatrices que portaban una guerra no contra “Ellos” sino contra sí misma. En la plática surgieron las dudas, los años y el recuento de creencias irracionales sobre el amor. El Trastorno Limítrofe de la Personalidad se enfoca en la inestabilidad de las relaciones interpersonales, imagen corporal y el estado de ánimo; las personas con dicho trastorno viven en un mundo estoico para evitar la sensación de abandono, acudir con un psicólogo y desarrollar las pruebas competentes brinda un panorama para un diagnóstico. Carmina se permitió sanar y compartir su historia, dejar de luchar por el amor y sólo fluir con él. Se acercó a personas cuyo amor nacía, no se fabricaba. Perdonó y se perdonó, vive en el insight de poder estar soltera, pero JAMÁS SOLA.

Por UNIMEDIOS DIGITAL

Agencia de Noticias fundada en noviembre de 2011 como un medio de información digital. Primer lugar en el Concurso Nacional Coberturas Periodísticas #PeriodistasContraLaTortura en 2022 organizado por Documenta. Dos premios estatales de Periodismo 2016 y 2018 en Coahuila en la categoría de Reportaje.