UNIMEDIOS/SALTILLO.- Con el fin de identificar la problemática en el funcionamiento extra jurisdiccional de los tribunales laborales y fortalecer la participación ciudadana, las Secretarías del Trabajo, así como la de Fiscalización y Rendición de Cuentas emitieron la convocatoria para conformar los “Observatorios Ciudadanos”.
La idea es que también formulen propuestas para la mejor operación de cada una de las Juntas de Conciliación y Arbitraje del Estado y que además sean coadyuvantes de las instituciones de administración laboral, informó Felicitas Molina, titular de la SENTRA.
Por su parte, el secretario de Fiscalización, Jorge Verástegui, dijo que la creación del Observatorio ciudadano es un Decreto que promulgó el Gobernador Rubén Moreira Valdez en meses pasados y tiene el propósito de mantener y mejorar la paz laboral, así como la función ordenada, transparente y profesional de las Juntas de conciliación.
De acuerdo a la convocatoria publicada el pasado viernes, el Observatorio Ciudadano se conformará por un consejo Técnico de nueve miembros de los sectores privado, social y académico, así como el cuerpo de observadores que tendrá el número de ciudadanos necesario para su funcionamiento.
El nuevo organismo estará asentado en las Juntas de conciliación y Arbitraje de los municipios de Saltillo, Torreón, Monclova, Sabinas, Piedras Negras y Acuña, agregó el funcionario.
Señaló que los interesados en formar parte del Observatorio Ciudadano, tienen hasta el 24 de julio para enviar su solicitud a la página de internet: www.sefircoahuila.gob.mx, o en las oficinas de la Secretaría de Fiscalización, ubicadas en periférico Luis Echeverría y Eje 2, s/n, en el Centro Metropolitano de Saltillo, de 9 a 15 horas o vía correo electrónico a observatoriociudadano@sefircoahuila.gob.mx.
Finalmente comentaron que para ser parte del nuevo organismo, los ciudadanos deben ser ciudadanos mexicanos en pleno uso y goce de sus derechos; mayor de edad; con residencia mínima de seis meses en el Estado; de reconocida honorabilidad; no desempeñar cargo público; ni ser ministro de culto y tampoco formar parte de órganos directivos de partidos políticos o electorales.