POR UNIMEDIOS
TORREÓN, COAHUILA. 13 de enero de 2020.- Al concluir la primera etapa de las investigaciones por los hechos ocurridos en el Colegio Cervantes de Torreón, la Fiscalía General del Estado solicitó una orden de aprehensión en contra del abuelo del menor identificado como José Ángel “N” de 58 años de edad por el delito de homicidio derivado de la negligencia en la tenencia de armas de fuego.
El Fiscal Gerardo Márquez Guevara señaló que “a esta persona le estamos atribuyendo que de alguna forma el homicidio de la maestra que pierde la vida en ese lugar, desde luego por haber asumido una conducta omisa que tiene que ver con haber sido negligente en la tenencia de armas de fuego en un domicilio particular en el que cohabitaba un menor de edad”.
Destacó que el imputado podría purgar de 18 a 35 años de prisión por el delito que se le señala, por lo que en este momento ya se encuentra internado en el Centro de Readaptación Social de Torreón, “el delito que se le imputa es homicidio por comisión por omisión”, precisó el Fiscal.
El funcionario señaló que se detectó la ausencia de valores morales y atención, de acuerdo a las primeras investigaciones que se han realizado respecto al caso que derivó en la muerte de una docente, así como cinco estudiantes y un maestro de educación física lesionados por los disparos de un menor de 11 años que posteriormente se suicidó.
Informó que la orden de aprehensión fue ejecutada alrededor de las 20 horas de este lunes en contra del abuelo del menor que tenía la custodia del estudiante de Torreón.
“Hay algunos datos interesantes que se pueden mencionar en forma circunstancial no sustancia, los elementos que nos han servido para la judicialización ha sido una serie de diligencias consistentes en entrevistas en los círculos cercanos al menor que acciona las armas de fuego, la balística y necropsia”, dijo.
Márquez Guevara reiteró que se realizaron alrededor de 30 entrevistas con personas cercanas a su entorno, incluyendo familiares y amigos para conocer la circunstancias que pudieron llevar al menor a realizar los disparos en contra de sus compañeros y maestros.
Aunque se le cuestionó sobre si son los abuelos quienes tienen la custodia, dijo que hay datos que no se pueden revelar porque son parte de la defensa que habrá de asumirse.
Señaló que los abuelos se dedicaban a ofrecer servicios de banquete y venta de espacios para fiestas, al reiterar que no hay registro de que el imputado fuera parte de una corporación de seguridad pública para portar las armas.